Queso elaborado por “Valle de la Cantarería”, esta quesería artesanal se sitúa en la pequeña localidad alcarreña de Canalejas del Arroyo, de la provincia de Cuenca, en la comunidad autónoma de Castilla-La Mancha, desde allí Cayetano Abad y su hija Ana elaboran este queso de leche cruda de cabra que debe su nombre al paraje del pueblo donde se siembran los forrajes con los que se alimentan los animales.
Cayetano Abad Escolar, electricista que trabajó como técnico de comunicaciones del Ministerio de Hacienda, emprendió este proyecto después de ser víctima de los atentados del 11-M de Madrid, un suceso tras el que tomó la determinación de cambiar radicalmente de vida. Se formó en industrias lácteas y decidió volver a sus raíces, al pueblo, para hacerse cargo de un rebaño de cabras y producir su propio queso de una manera artesanal y poco habitual en esta parte del país.
Allí opera junto con su hija Ana Abad la quesería “Valle de la Cantarería”, una quesería familiar que tiene su propio ganado de cabras murciano-granadina y elaboran su queso con leche cruda de su propia ganadería.
Ana Abad Guerrero es ingeniera agrónoma y veterinaria y una apasionada de todo lo relacionado con la producción y cría animal tanto de la especie equina como caprina. Así como de la gestión de la industria agroalimentaria del sector lácteo en el medio rural.
El Valhondo es un queso elaborado con leche cruda de cabra de coagulación láctica madurado con mohos. Con corteza enmohecida comestible. Y afinado de 3 a 4 semanas.
Se caracteriza por tener un olor y aroma limpio y refrescante en nariz y boca. Toques cítricos y lácticos a yogur, mantequilla y nata. Textura blanda, cremosa y fundente. Valhondo, en su primera etapa, de 21 días, nos recuerda a una primavera. Al ser un queso con vida, va cambiando a lo largo de su maduración día a día, y con el tiempo ganará fuerza.
Es importante comer este queso a temperatura ambiente para degustar mejor su riqueza de sabores. Combina bien con frutos secos o nueces, acompañado de un crujiente pan de ligeramente tostado, funde muy bien, por lo que también, es ideal en ensaladas y sopas. Marida muy bien con un vino blanco ligero de la zona.
Foto: QAVA de Quesos