Tomme du Vaumadeuc

Este queso lo elaboran Marie Paule y Jean-François Lévêque en la Fromagerie Vaumadeuc, ubicada Pléneuf-Val-André, una población francesa, situada en la región de Bretaña, departamento de Côtes-d’Armor.
Durante varias generaciones, los miembros de la familia han trabajado la tierra de la Granja Vaumadeuc. Los bisabuelos François y Marie Lévêque se convirtieron en propietarios de la granja en 1902. Fue en 1987 recién casados, cuando Jean-François y Marie-Paule Lévêque se hicieron cargo de la granja Vaumadeuc de manos de sus padres y abuelos. Rápidamente, se dan cuenta de que la evolución de la profesión de campesino requiere complementar la actividad tradicional de Vaumadeuc.
La idea de agregar valor a la leche producida en el lugar les surge durante una estancia en el Macizo Central. Aunque Bretaña no es una tierra famosa por sus quesos, los dos jóvenes agricultores están convencidos de su proyecto. En 2018, construyeron una nueva quesería adaptada a las cambiantes condiciones de trabajo y Sophie Burlot se unió al equipo.
El Tomme du Vaumadeuc es el primer queso nacido de su producción, le siguió el Val Doré, un queso de abadía y, finalmente crearon el Grand Madeuc, un queso de la familia de los Gruyère.
Paralelamente a la quesería, Jean-François sigue cultivando la tierra. En concreto, hace unos años plantó trigo sarraceno (Fagopyrum esculentum o Polygonum fagopyrum), un cereal anual muy conocido en Bretaña, ya que de él procede la denominada harina de trigo sarraceno con la que se elaboran las tortitas que dan fama a esta región francesa.
La Tomme du Vaumadeuc, es el primer queso de esta quesería, creado en 1987. Rápidamente se ganó una buena reputación en la región. Es un queso de leche entera y cruda de vaca, de pasta semidura, prensada no cocida. El queso madura durante 3 meses en una bodega a una temperatura de 12°C y muy húmeda. Los quesos se colocan sobre tablas de abeto y se voltean con frecuencia.
Aspecto: corteza florida, pasta firme, textura fina.
Aroma: especiado, bien tipificado.
Sabor: fuerte, ligeramente picante.
La Tomme du Vaumadeuc se puede guardar en el compartimento de verduras del frigorífico en su papel de envolver, envuelto en un paño húmedo, y siempre sacarlo del frío un tiempo antes de consumir, para que se atempere y así poder degustarlo en sus óptimas cualidades.
La Tomme du Vaumadeuc se presta perfectamente para cocinar: Fundido en tortitas de trigo negro, tartas de queso… También se puede disfrutar con mermelada de cereza negra. El acompañamiento ideal es un buen tinto de Côtes du Rhône, Borgoña o un Beaujolais.