Tasugueras

Este queso lo elabora la quesería La Jarradilla, situada en Barcenilla (Tezanos de Villacarriedo), en pleno corazón del valle del Pisueña.
La familia Diego lleva elaborando quesos de leche de su propia ganadería desde hace más de veinte años, basados en el respeto por la calidad de los ingredientes y las formas tradicionales de elaboración que se llevaran a cabo en la casa familiar durante generaciones.
Aunque el Tasugueras nace en Cantabria, terminará su crecimiento en las bodegas de maduración de la Quesería Cultivo en Valladolid.
Cultivo es un afinador, ellos buscan y seleccionan quesos que se elaboran en diferentes queserías de toda España, pero no cualesquiera, han de ser quesos que cumplan los perfiles afines a su filosofía, para conseguir que el resultado final sea potencialmente diferente al que se hubiera obtenido si el queso hubiese sido desarrollado en su casa ‘’madre’’, o quesería de origen.
Escogen los quesos jóvenes, en el caso del Tasugueras con apenas dos semanas y lo llevan a las cámaras de Cultivo para ser afinado durante dos meses, «en unas condiciones de temperatura y humedad que hacen que se vuelva realmente cremoso y desarrolle una corteza enmohecida natural muy interesante». Su pasta es cremosa, suave y untuosa. La corteza aporta unos aromas y matices evidentes a tierra y a humedad. Es un queso elaborado con leche pasteurizada de vaca, cuajo tradicional y coagulación enzimática.
El Tasugueras es la fusión perfecta entre dos de los quesos cántabros tradicionales: Pasiego y Divirín, pero con el espíritu innovador que caracteriza a las nuevas generaciones de queseros.
Es importante consumir este queso a temperatura ambiente, si quiere saborear toda su fragancia de matices. Una vez llevado a la temperatura adecuada, puede servirse como queso de mesa acompañado con un buen pan crujiente. Con frutos secos y frutas. En bocadillos. Para enriquecer sopas o, espesar las salsas. Marida muy bien con vinos blancos o cervezas.