Serrat
Queso elaborado inicialmente con leche cruda de oveja, y actualmente con leche de vaca, o mezcla. Es de media a larga curación, cilíndrico, color amarillento. Sabor muy peculiar, un poco picante y de masa compacta o cerrada (de aquí su nombre Serrat). Originalmente se elaboraba en la primavera y comienzos del verano, aunque hoy en día, los escasos ganaderos que se dedican al queso procuran elaborarlo a lo largo de todo el año, excepción hecha de finales de otoño y principios de invierno.
Es uno de los quesos más antiguos de España, representante de la cultura del pastoreo en los valles del Pirineo, donde las ovejas autóctonas de raza Txiqueta y Ripollesa, se han ido adaptando a lo largo de los años al durísimo clima del frío y la alta montaña.
Inicialmente la oveja se dedicaba a la producción cárnica pero con el paso del tiempo, la producción quesera ha ido tomando protagonismo.
La leche se calienta a 34-36º y se cuaja con cuajo vegetal, actualmente, también se utiliza el animal. La masa cuajada, se corta en tamaño grano de arroz, se desuera y se moldea para su prensado.
El salado es el paso siguiente y por último maduración en bodega fresca y un poco húmeda, durante 2-3 meses como mínimo.
SUGERENCIAS DE DEGUSTACIÓN: Se suele utilizar rallado encima de carnes rojas, en lonchas muy finas o virutas para decorar y resaltar el sabor de los carpaccios o los rosbif. También se presenta en ensaladas de escarolas o berros y frutos secos en forma de dados muy pequeños.
Una amiga nos invitó la semana pasada a comer en su casa de una aldea de Segovia, cordero pero a la egipcia. Mmm.
Yo me encargué de los quesos. Uno fue un Serrat que alabó hasta el peregrino francés a Santiago, al que nuestra amiga hizo un sitio en la mesa.
Nettle