Rushan (乳扇)
En China, los quesos no suelen formar parte de la dieta habitual de la gente y la mayoría de las variedades que pueden hallarse en el país son importadas. Una excepción es la provincia de Yunnan, la más sureña, con altas cumbres, volcanes, selvas, y ríos legendarios como el Mekong o el Yangtsé.
Allí, minorías locales elaboran quesos tradicionales difíciles de conseguir fuera del país, como el rubing, un queso fresco de cabra cuyo nombre puede traducirse como algo parecido a “pastel de leche”.
Se trata de un queso fresco, blanco, de textura correosa sin corteza se presenta con diversas formas y tamaños.
El Rushan, que significa literalmente “abanico”, es un queso elaborado tradicionalmente por la población Bai. Emplean para ello leche de vaca que coagulan utilizando leche agria del día anterior o vinagre de arroz. La masa se parte en pequeñas bolas que se calientan en suero lácteo. Las bolas de queso se conservan entre dos esterillas de bambú enrolladas.
Los puestos callejeros suelen servir el Rushan frito o a la plancha, en brochetas de madera, y también se puede encontrar relleno de chocolate, leche condensada, miel o frutas.