El queso americano se ha diversificado considerablemente en los últimos años, tanto por lo que se refiere a la variedad de los quesos como a la calidad.

La producción de queso estadounidense se remonta a los pioneros del siglo XVII que aportaron su saber hacer en la transformación de la leche. Cuantos más europeos emigraban a Estados Unidos, más se desarrollaba la gama de quesos al estilo español, inglés, suizo, francés o italiano.

Como en muchas áreas, los estadounidenses se han interesado por el mundo del queso y hoy en día se ha desarrollado de manera sostenible una comunidad de verdaderos conocedores en todo el país. Miles de nuevos productores de queso artesanal estadounidense se han asentado en todas las regiones, representando terruños de gran diversidad.

Al igual que en el mundo del vino, los estadounidenses han logrado una educación gastronómica en torno al queso, tanto es así que hoy en día se elaboran más de 1.500 variedades de queso artesanal en Estados Unidos.

Fuente: Androuet