Pecorino es el nombre que reciben todos los quesos italianos elaborados con leche de oveja. La mayoría de los Pecorinos son quesos grasos porque la leche de oveja contiene cantidades muy elevadas de grasa butírica, una de las razones por las que este queso es tan delicioso. El alto contenido de grasa butírica explica las gotas de aceite que se suelen ver cuando el Pecorino está a temperatura ambiente. Llamadas «lágrimas de grasa de mantequilla», gotean naturalmente del queso. Úselos como un indicador para saber que el queso que ha dejado fuera del refrigerador por un tiempo está a la temperatura perfecta para comer. El Pecorino Pepato es un queso gourmet italiano de leche de oveja salpicado de granos de pimienta.
El Pecorino Pepato tradicional procede de Sicilia, donde forma parte de la cocina regional.
Aunque no se te ocurriría añadir pimienta a un vaso de leche, sí que le da un toque especial a otros productos lácteos. En la India, el lassi, una bebida fría de yogur, se prepara a menudo con pimienta negra. En Francia e Italia, los granos de pimienta se añaden a los magníficos quesos. El Pecorino Pepato, con granos de pimienta negra enteros, tiene un sabor a pimienta que irrumpe en el paladar. El sabor del Pecorino es denso, y la sensación de los granos de pimienta aportará una nueva dinámica a su próxima comida. El Pecorino Pepato suele consumirse como queso de mesa, pero considere la posibilidad de rallarlo sobre judías frescas (perfecto para las ensaladas de verano) o verduras ligeramente salteadas. Utilícelo en lugar del Parmigiano, rallándolo sobre un plato de pasta caliente aderezada con aceite de oliva y ajo. Si es un gran amante de la pimienta, añada también un poco de pimienta molida gruesa a esta cena elegantemente sencilla.