Mach Bon
El Mach Bon lo elabora el Caseficio Pier Luigi Rosso, en Biella, Piamonte. La lechería Pier Luigi Rosso es una empresa familiar de cuarta generación, que elaboran quesos desde hace más de 100 años, siguiendo la tradición quesera de los valles alpinos de Biella.
La lechería se encuentra en la zona de Biella, donde el Valle de Oropa se junta con el de los Ciervos en el centro del arco alpino biellese. Desde la llanura del valle se puede observa un grandioso anfiteatro delimitado al oeste por las murallas de morrena de la Serra de 25 Km. de largo, la cresta del Mombarone al norte y al este con el imponente perfil de los Alpes. Las partes bajas de los valles, tienen una gran alfombra verde en el que operan cientos de pequeñas fincas dedicadas a la producción. En la zona más occidental de Biella, en el Alto Valle Elvo, se encuentra la sala de crianza de la granja de la familia Rosso, y la cámara de envejecimiento del queso.
Este queso también se conoce como Tomma Biellese “Mach Bon” es un queso de pasta semi blanda semicurado con leche pasteurizada de vaca. La corteza es delgada, gris-marrón. En los quesos más maduros se presenta el característico moho de color amarillo. Uno de los lados se imprime con la marca corporativa «TR». La corteza no es comestible. Tiene forma cilíndrica con un diámetro de 19 cm. y una altura de 9 cm., peso promedio de aproximadamente 2,5 kg. La pasta es blanca con tonalidades amarillas, delgada tiene agujeros distribuidos irregularmente. El sabor es dulce, agradable y delicado. Se envejece en las bodegas de la quesería sobre tablas de abeto blanco por un período que varía de 30 a 90 días.
El Caseificio Rosso elabora una amplia gama de quesos, entre los que destacan la Toma Maccagno, que era el queso favorito de la reina Margarita de Saboya, el Gratin un queso de leche pasteurizada de vaca, o el Gratin Bleu, el mismo que el anterior pero con la típicas venas de moho azul, la Toma Biellese a Latte Crudo, como indica su nombre un queso de leche cruda de vaca, y muchos más.
Servido a temperatura ambiente es perfecto para comer solo o acompañado con pan de centeno, o sobre patatas cocidas, o en platos cocinados con pasta, también para sazonar vegetales crudos o cocidos. Se adapta maravillosamente bien con vinos tintos de la tierra.