Lindis Pass Brie

Los primeros europeos de los que se tiene constancia que desembarcaron en Nueva Zelanda fueron los holandeses, en 1642 y los británicos, en 1768 -1771. Las influencias de estos países son patentes en la prolífica producción de Cheddar y Gouda. El clima en Nueva Zelanda se parece mucho al de Italia, pero el hecho de estar aislado de influencias continentales y expuesto a los vientos fríos del sur y las corrientes oceánicas aporta al clima un carácter más moderado, proporcionando suelos fértiles para el pastoreo de los animales.
Las autoridades neozelandesas desde hace un tiempo estaban barajando la posibilidad de permitir la producción de quesos con leche sin pasteurizar, además de importar quesos elaborados con leche cruda de Europa. Y así en 2007 los cambios en la legislación permitieron la importación de algunos quesos de leche cruda. En primer lugar, el Roquefort, a continuación, en 2009 una gama más amplia incluyendo el Brie. Hoy en día la legislación permite a los fabricantes neozelandeses producir quesos de leche cruda, aunque actualmente no hay ningún quesero que los produzca comercialmente. Si bien la idea no es bien acogida por todos, es de inmensa importancia para aquellos queseros interesados en experimentar con nuevos cultivos impulsores como Bob Berry que fundó en los años ochenta la empresa Whitestone Cheese, en Windsor, en el corazón del Norte de Otago. Bob es otro pionero del renacimiento de la producción de quesos en Nueva Zelanda. Desarrollado a partir de la receta del “Brie de Meaux”, pero con leche pasteurizada, el Lindis Pass es la última creación de la Whitestone Cheese. Diseñado para satisfacer a los amantes del queso más exigentes, este queso requiere que realice una completa maduración para darnos cuenta de su potencial, y permitirle así que libere sus complejos sabores terrosos setas. Cuando es joven tiene un centro firme, que poco a poco se ablanda y tiende a derretirse en los bordes cuando está maduro llegando a tener una textura sedosa y cremosa como la nata espesa. El Lindis Pass Brie se comercializa en forma de disco plano y redondo gran su tamaño pesa la friolera de 1,8 kg. y está disponible sólo en tiendas especializadas de queso. Lleva el nombre del puerto de montaña que es el punto de inicio de la cuenca del río Waitaki. El espectacular paso de Lindis une la cuenca de Mackenzie con Central Otago. Esta zona alpina de montañas altas cubiertas de pastizales es hermosa en todas las estaciones, pero es particularmente encantadora cuando está cubierta por un manto de nieve como este queso que también está cubierto por una corteza blanca como la nieve. El queso puede consumirse tanto como aperitivo, o como postre, y tanto sólo, como en combinación con otros, en tabla de quesos. También es excelente acompañado de pan en tostadas, en sandwiches, o fundido sobre carnes. Marida bien con un Chardonnay.