Leffond
El Leffond es un queso elaborado por la Fromagerie Milleret, situada en Charcenne, una población francesa, en la región de Borgoña-Franco Condado.
En 1921, en Franco Condado, el granjero Henri Milleret creó una quesería que llevaría el nombre de su familia. Se instaló en la pequeña capilla de Leffond, situada a la salida del pueblo de Charcenne, en el departamento de Alto Saona. En aquella época sólo se transformaban en queso unas pocas decenas de litros de leche. Desde entonces, sus hijos, y luego sus nietos, han velado por el desarrollo de la quesería, que sigue siendo 100% de propiedad familiar.
La Fromagerie Milleret se ha desarrollado respetando los valores originales y el saber hacer familiar. Su primer éxito se remonta a 1951, con un queso llamado Charcennay. Este queso sigue siendo muy popular hoy en día por su finura y cremosidad. A continuación llegaron el Ortolan y el Roucoulons, cuyo éxito llevó a la quesería a expandirse a escala nacional, sin olvidar este queso Leffond, hecho en honor a la Capilla donde se inicio todo.
Cien años después, la Fromagerie Milleret sigue establecida en el pueblo de Charcenne, donde es el principal empleador con sus 207 empleados. La empresa está dirigida por Denis Milleret, nieto de Henri Milleret.
La Fromagerie Milleret tiene un enfoque sostenible y orgánico. El 100% de la leche procede de circuitos cortos ya que se recoge en unas 130 granjas del entorno, en un radio medio de 40 km desde la quesería. A continuación, la leche se pone rápidamente en producción en un plazo máximo de 48 horas. Las vacas estrella de la región son la raza Montbéliarde, fácilmente reconocible por su pelaje blanco con manchas marrones; es en gran medida la mayoría en los rebaños.
Nacido en la Capilla de Leffond, este pequeño queso recorre la historia de la quesería.
El Leffond es un queso de pasta blanda elaborado con leche pasteurizada de vaca. Fue una de las primeras creaciones de Henri Milleret, un queso pequeño, redondo y de sabor suave a nuez y su textura crujiente y fundente. Durante su periodo de maduración de 2 semanas, el queso desarrolla su flora blanca y noble.
El queso se comercializa en forma de pequeño disco de 10 cm de diámetro, por 5 cm de espesor y un peso de 125g.
Es importante comer este queso a temperatura ambiente para degustar mejor su riqueza de sabores. Se come fresco o ligeramente maduro y, por lo tanto, más seco. Funde de maravilla, por lo que es perfecto caliente sobre una rebanada de pan tostado con mermelada de pera o miel de romero, también sobre ensaladas, verduras y patatas asadas. En sopas y salsas aporta un sabor nuevo e interesante. Puede servirse en una tabla de quesos. El Leffond es un queso que requiere un vino blanco seco para acompañar.