Le Saint Mont des Alpes
Fundada en 1954, Monts et Terroirs se especializa en la elaboración de quesos con denominación de origen. Pertenece a la cooperativa lechera francesa Sodiaal, que también posee las marcas Yoplait, Candia y Entremont. Le Saint Mont des Alpes se elabora desde el año 2003 en Labathie, una población francesa, situada en el valle de la Tarentaise en la región de Auvernia-Ródano-Alpes, departamento de Saboya.
Todas las granjas que suministran leche a la quesería crían sus rebaños en la agricultura tradicional. Sus vacas pastan libremente en verano y son alimentadas con heno durante el invierno. Este tipo de agricultura llamada «extensiva» participa plenamente en el mantenimiento de los paisajes, el respeto por el entorno y su biodiversidad, así como el equilibrio necesario para el desarrollo turístico de esas regiones. Le Saint Mont des Alpes es un típico queso de montaña, elaborado con leche cruda de vacas de las razas Tarine o Abondance, de pasta prensada y cocida. La corteza tiene consistencia dura, un aspecto grasiento y color dorado a pardo. La pasta se puede cortar fácilmente y presenta un color marfil a amarillo claro. Es un queso que normalmente no presenta agujeros. Su textura es fundente y cremosa con un agradable olor a mantequilla. Sabor muy afrutado y ligeramente salado. Gracias a la curación tradicional en caliente, la flora alpina se expresa plenamente en este tipo de queso con aromas ricos y generosos.Se necesitan unos 10 litros de leche para producir un kilo de queso. Llega a su plena madurez después de 7 meses de maduración en un sótano cálido en Courlaoux. El queso se comercializa en forma de rueda, con los lados planos y rectos, y con el borde redondeado con 65 cm. de diámetro, 10-11 cm. de alto y un peso de 40 kg. Le Saint Mont des Alpes es un gran queso para cocinar, pero realmente brilla en un plato de queso cuando se sirve con uvas frescas o una manzana crujiente o rallado, cortado en finas lonchas o virutas, fundido para acompañar a las patatas hervidas con verduras. Para acompañar el queso se recomiendan vinos blancos con crianza y de aromas frutales.