Le Péribonka

Este queso lo elabora la Fromagerie La Normandinoise, una quesería típicamente artesanal y familiar, basada en una granja lechera situada en Normandin, al norte del lago St-Jean, cuya historia se remonta a 1979. En 2006, la pareja Hélène Cadieux e Yvon Fortin fundan la quesería con el fin de procesar la leche de granja y de integrar a largo plazo a sus hijos, Vincent y Maxime, y así continuar la aventura con la tercera generación. La quesería elabora con cariño queso de granja, producido únicamente con leche fresca del rebaño de 50 vacas de pura raza Holstein, alimentadas con el forraje, el maíz y la soja propios de la granja.
En 2020, La Normandinoise emprendió un gran proyecto de ampliación y modernización que le permitirá posicionarse como líder en la industria y comenzar la aventura de las ventas fuera de Quebec. La familia también tiene otros proyectos ambiciosos para los próximos años, vamos a ver las sorpresas que nos deparan.
Este queso de pasta blanda con corteza mixta, de color naranja por la acción del achiote, un colorante de origen vegetal y ligeramente florida gracias al penicillium candidum con que se rocía. El queso está elaborado con leche entera y pasteurizada de vaca. En su interior la pasta es de color amarillento, de untuosa a fluida cuando está a temperatura ambiente. Su sabor salado, láctico y algo rústico ofrece deliciosos aromas a verduras y champiñones.
El nombre del queso se inspira en el pequeño pueblo Péribonka situado en el condado de Maria-Chapdelaine al norte del lago Saint-Jean. Desde hace casi medio siglo, Péribonka es el punto de partida de la famosa travesía internacional del Lac-Saint-Jean que ve a los más grandes nadadores del mundo enfrentarse a sus olas en dirección a Roberval.
El queso se comercializa en forma ovalada y con un peso de 150 g.
Si todos los quesos es importante consumirlos a temperatura ambiente, en este es imprescindible, si quiere saborear toda su fragancia de matices.
El Péribonka deleitara las tablas de quesos con su original color. Su forma ovalada permite cortarlo en prácticas rebanadas para compartir en el aperitivo o para una presentar en una tabla de quesos.
Se puede saborear sobre una rebanada de pan de payes acompañado de frutas frescas (manzanas o peras) o frutos secos, (nueces o avellanas). Este queso lo maridaremos con un vino blanco suave.