Le Gros Lorrain

Después de dos años de investigación, un reconocido maestro afinador, de Nancy, Francia, junto con un productor de las montañas de los Vosgos de Lorena, han restaurado el Gros Lorrain, un queso olvidado.
La historia comienza en un ático. Donde Philippe Marchand, heredero de una familia que ha hecho quesos curados en Lorena durante seis generaciones, descubrió un molde redondo de madera de abeto. En el interior del molde se encontró un cuaderno que contenía las observaciones escritas a mano por su abuela que indican los detalles complejos sobre cómo envejecer el Gros Lorrain, un queso muy antiguo de la Región de Gérardmer. Philippe se sintió particularmente satisfecho de su descubrimiento, sobre todo porque este tipo de queso en particular había desaparecido de la circulación más de medio siglo antes! Sintió que se le había encomendado una misión, no sólo para honrar la memoria de su abuela, sino también por amor a su tierra, Lorena. Así, el Maestro afinador, Philippe Marchand, comenzó la búsqueda de un quesero capaz de hacer frente al desafío. Se encuentra con un granjero en busca de nuevos mercados para mejorar y aumentar el valor de la leche de su granja. La idea de participar en el resurgimiento de un queso desaparecido durante tanto tiempo le seduce inmediatamente. Sin embargo, a pesar de todos estos esfuerzos, ya pesar de un deseo común de hacer lo correcto, los comienzos son difíciles. El noventa por ciento de los quesos Gros Lorrain se tuvieron que descartar, debido a que durante la maduración se volvían amargos. Después de dos años de pruebas e investigaciones, el Gros Lorrain de Frères Marchand, consiguió superar todas las pruebas y resurgir. El éxito superó todas las expectativas con 20 toneladas del queso Gros Lorrain vendidos este año en toda Francia, Europa y Japón. Es un queso muy similar Crayeux de Roncq, el Gros Lorrain es un queso elaborado con leche cruda de vaca, un queso típico de corteza lavada de color anaranjado, puede tender hacia blanco o rosa pálido. La pasta es calcárea cuando el queso es joven, luego se ablanda más allá de los 3 meses de maduración. El método de fabricación es similar a la del Munster, pero sin embargo, con diferente maduración, que da como resultado un queso más afrutado y más fundente que su primo el Munster. Es fuerte en la boca, pero suave al paladar y exuda aromas sutiles de frutas. Se puede disfrutar ya sea frío o caliente. Madurado en una bodega a 11 grados durante tres a cinco meses, en comparación con las tres a seis semanas para el Munster, el Gros Lorrain es también mucho mayor. Su peso es de 5 Kg. mide 33 centímetros de diámetro y se produce a partir de 40 litros de leche. Este es el mayor queso de pasta blanda y corteza lavada que se hace en Francia. El quesero afinador lorenés, Philippe Marchand subraya que el origen de la desaparición de este queso seguramente es debido a su formato atípico y a su delicada maduración. El Gros Lorrain tiene su punto más seductor cuando está perfectamente maduro. En esta etapa se vuelve suave y aterciopelado, casi licuado y es mejor comerlo simplemente con un trozo de pan crujiente. Excelente con un Gewurztraminer de cosecha tardía, un Chardonnay afrutado o un Riesling.