Le Coulant Comtois
El nombre del queso ya nos da las pistas tanto de su textura como de su procedencia, Coulant (en español puede traducirse como fluido o líquido) y Comtois (significa originario de la región de Franco-Condado).
Se trata de un queso de leche pasteurizada de vaca, de pasta blanda y corteza natural con un cinturón de madera de abeto. Es un queso elaborado en las montañas de Jura, cerca en los Alpes, en la misma zona de elaboración del Mont d’Or. La fabricación se realiza parcialmente a mano. Este queso está rodeado de un anillo de madera de abeto (para que sea fácilmente moldeable) y esto influye apreciablemente en su sabor final, se forma una superficie de hongos blanca y esponjosa. Posee un contenido graso del 50%. El olor recuerda a setas, tierra de bosque y olor húmedo a sótano. El sabor ligero terroso y refrescante con notas a humus, de gusto afrutado, recuerda a nueces, con toques de madera a causa del cinturón de abeto que le rodea. La resina se extiende poco a poco, por la masa dándole al conjunto un sabor característico muy especial. Cuando madura, se sirve al estilo «torta» es decir, la consistencia de la pasta es casi líquida, por esta razón puede comerse con cuchara. El queso joven puede servirse entero como plato de queso, con crackers y una buena combinación de fruta, o bien untarse sobre tostaditas y fundirse en el horno. Cuando está más maduro, se consume cortando la corteza superior e ingiriendo el queso casi líquido del centro. Marida con un vino blanco dulce como el Riesling, Gewürztraminer o un Bach Extrisimo del Penedés.