Ländle Klostertaler
Este queso procede del estado de Vorarlberg en la parte más occidental del país, lindando con Alemania, Suiza y el pequeño estado de Liechtenstein. Zona rica en praderías de montaña, no es de extrañar que Vorarlberg albergue una nutrida cabaña ganadera y más de un centenar de granjas lecheras.
Encontramos también grandes cooperativas dedicadas al procesamiento de leche y producción de lácteos. Una de ellas es la Vorarlberg Milch, ubicada en la localidad de Feldkirch. Además de leche, mantequillas y yogures, producen una amplia gama de quesos, incluidos varios Volralberger con Denominación de Origen Protegido. Otra de sus marcas es Ländle y uno de sus quesos es este Ländle Klostertaler.
El Ländle Klostertaler es un queso curado como mínimo de 7 meses, elaborado con leche entera y pasteurizada de vaca. Un queso de pasta prensada y semicocida, de corteza lavada con una suave salmuera y fermentos del rojo, que le confiere su aroma y sabor tan característicos que recuerda a un Appenzeller suizo. Se presenta en grandes ruedas de 7,5 kg.
El Ländle Klostertaler presenta una corteza color rosado levemente pegajosa, mientras el corte es ciego, firme y elástico, con tono amarillo y fino ribete oscuro. El aroma llega con cierta contundencia pero sin excesos, ofreciendo un tono afrutado que puede recordar a piña o incluso a piezas más tropicales. Detrás viene la parte láctica viejuna, mantecosa, acaramelada, tostada y especiada. Un punto animal susurra desde la corteza. Con el bocado denso y pastoso, crujiente a ratos, llega un sabor intenso, dulce y salino, repleto de fruta madura y mantequilla vieja, sazonado de especias. Muy rico, sabroso y prolongado.
El Ländle Klostertaler ha conseguido dos flamantes Supergold obtenidos en los Word Cheese Awards de 2013 y 2017.
Este queso es idóneo para consumir directamente como queso de mesa por su gran y elegante sabor. En las épocas frías, se puede utilizar para gratinar o para preparar fondues de todo tipo. Muy recomendado para consumir acompañado de vinos blancos o rosados, panes integrales o de cereales y fruta fresca dulzona.
Fuentes consultadas y foto: birrasyquesos y Ardai