La Torrota
Este queso lo elabora Jordi Lorente en su Formatgeria La Frasera (Formatges de pastor). La quesería está ubicada en la Masía La Frasera en (Castellet de Dalt) de Vacarisses, rodeada de un entorno de gran valor paisajístico y natural, entre los parques naturales de Montserrat y Sant Llorenç i l’Obac.
Un proyecto que consta de quesería, casa rural, y producción de aceite de oliva virgen ecológico y autóctono (en proceso). La quesería dispone de su propio rebaño de cabras de raza murciano-granadina, que pasta en los bosques de la finca. La crianza saludable en un entorno natural permite la obtención de una leche de gran calidad. El hecho de que el quesero disponga de rebaño propio le otorga un valor añadido a su producto puesto que controla todo el proceso.
En la quesería La Frasera elaboran quesos artesanales con leche de cabra al estilo tradicional, recuperando el sabor, textura y aroma de los quesos de siempre. Su dedicación y afecto les permite obtener unos productos naturales, buenos y de calidad.
La quesería elabora una variada gama de quesos artesanales hechos con leche de cabra al estilo tradicional, recuperando el sabor, textura y aroma de los quesos de siempre. El resultado son unos productos naturales, buenos y de calidad.
La Torrota es un queso de leche pasteurizada de cabra, de coagulación láctica y de corta maduración, con corteza enmohecida y de color blanco al corte.
Textura blanda y cremosa, y húmeda en boca, que penetra profundamente al paladar, sorprendente. En boca se alarga con un regusto intenso y agradable. Según el tiempo de maduración, presenta en la corteza toques picantes en boca.
En su maduración desarrolla en superficie hongos entre azules y grises que le dan un aspecto y sabor característico.
La Torrota en una pieza pequeña de entre 150 y 200 g.
Este queso lleva el nombre e incluso tiene la forma de un espacio emblemático de su municipio de origen. Heredera de épocas históricas pasadas, la figura vertical de formas redondeadas de la Torrota parece vigilar desde su privilegiada atalaya la población vallesana de Vacarisses. En el siglo XI, una red de torrotas servía de complemento a la tarea defensiva de los castillos. Situados sobre las líneas de cresta, permitían a los colonos vigilar los ejércitos sarracenos y comunicar su llegada mediante señales ópticas que se iban enviando de una torre a otra.
El queso Torrota ganó la medalla de plata en la categoría de Pastas blandas y ácidas de cabra en el concurso Lactium 2017, la muestra de quesos artesanos de Cataluña que se celebra en Vic.
Para degustar toda la riqueza de sabores se recomienda el consumo a temperatura ambiente.
Gracias a su pequeño tamaño el Torrota es perfecto para llevar y disfrutarlo en un picnic solo. Es perfecto caliente sobre una tostada, y acompañarlo de frutos secos (almendras, nueces) y frutas frescas, como fresas. También puede enriquecer sopas, salsas y ensaladas a las que les aporta un sabor nuevo e interesante. El maridaje ideal es un vino blanco ligero para resaltar los sabores de ambos tanto del queso como del vino y a ser posible de proximidad.
