Kaasterkaas

La quesería donde se fabrica este queso se llama ‘t Groendal y pertenece a Johan Deweer y su esposa Dominique Steyaert, actualmente su hijo Louis-Philippe Deweer (cuarta generación) colabora con ellos, la granja familiar se ubica en el suavemente ondulado paisaje de Rumbeke una comuna perteneciente municipio de Roeselare, en la provincia de Flandes Occidental. El lugar es más conocido como la ubicación del castillo de Rumbeke, uno de los castillos renacentistas más antiguos del país.
La artesanía y la calidad son fundamentales para esta empresa familiar. Para lograrlo, trabajan junto con los ganaderos locales que tienen pasión por las vacas y la leche.
El Kaasterkaas es un queso de granja blando con una corteza lavada de moho rojo. Está elaborado con leche pasteurizada de vaca. Durante la maduración (3 – 4 semanas) el queso se lava con salmuera, esto le da al queso una corteza natural de color rojo claro a marrón claro, y una pasta de color amarillo claro, con una textura suave y cremosa, con algunos pequeños ojos y un sabor ligeramente pronunciado. En términos de sabor y estructura, se encuentra entre un fuerte Munster y un cremoso Reblochon: picante y suave al mismo tiempo.
Este queso cremoso ha ganado una medalla de bronce en los premios World Cheese Awards.
Es importante comer este queso a temperatura ambiente para degustar mejor su riqueza de sabores. Para disfrutar mejor de este queso lo ideal es comerlo solo o en compañía de verduras asadas, especialmente las patatas, la coliflor y las coles de Bruselas. Es súper fácil de comer, un poco dulce, y la masticabilidad absolutamente perfecta (¡casi se derrite en la boca!). Funciona de maravilla en una clásica receta Tartiflette (el plato tradicional francés hecho con Reblochon fundido sobre patatas asadas), en este caso usando el Kaasterkaas como sustituto.
La combinación ideal para este queso es con una cerveza belga, «Vicaris Tripel», una cerveza blanca turbia, con notas de levadura, especias, frutas y notas florales.