Grès Champenois
El Grès Champenois es una nueva creación procedente de una pequeña lechería de la región de Champagne al noreste de Francia.
Considerado la versión «blanca» del Grès des Vosges, ya que es completamente idéntico, salvo por su procedencia y porque este tiene una delgada corteza enmohecida suave y esponjosa. La otra gran diferencia es la de que el Grès Champenois es un queso doble crema (Para alcanzar el contenido de grasa necesaria para ser considerado un doble crema (ha de tener al menos el 60 por ciento de grasa en la materia seca – el queso menos el agua), el quesero tiene que complementar la leche de la vaca con crema o nata).
Los quesos de doble cremosidad se posicionan a medio camino entre un Brie clásico (alrededor del 45 por ciento de grasa) y un triple crema como el Brillat Savarin (alrededor del 75 por ciento de grasa).
Para su fabricación cada queso se moldea individualmente a mano en formas sobre todo ovales de unos 125 g. Los quesos maduran durante 14 días.
La corteza esta cubierta de un fino velo de moho aterciopelado de un color blanco puro, que solo es interrumpido una hoja verde en la parte superior, (según el fabricante, la hoja es natural (debe ser en los quesos de consumo de proximidad) en mi caso, (de exportación) la hoja era de papel). En su interior la pasta de color amarillo tiene una maravillosa textura cremosa que se derrite en la boca. El sabor es agradablemente láctico y ligeramente amargo, con una leve salinidad, pero logrando un buen equilibrio final, gracias a la dulzura de la nata añadida. El Grès Champenois se envasa en una atractiva caja de madera, en la que se nos recomienda guardarlo mientras no se nos termine, cosa que posiblemente ocurra rápidamente, en parte por su pequeño tamaño y en parte, por su adictivo sabor. Se puede disfrutar de él con un buen pan crujiente, con frutas y nueces. En bocadillos. Para enriquecer sopas. A la plancha sobre pan o para ligar salsas. Pocos quesos son tan fáciles de maridar como este, siendo originario de la región del vino espumoso por excelencia, Champagne, en este caso un Brut Rosé.