Fiore Sardo
No hay que dejarse guiar por el olor agrio y húmedo de su corteza: el Fiore Sardo es el más dulce de los Pecorinos. De color pajizo y compacto, este queso duro y granulado tiene un maravillosamente pleno sabor, con dulzón de caramelo, algo salado y con un toque frutal.
Para coagular la leche se utiliza cuajo de cordero o cabrito. El método se diferencia del usado con el Pecorino tradicional en que la cuajada no se cuece ni se calienta en el suero. Una vez que se ha escurrido el suero, las cuajas se escaldan en agua caliente para sellar la corteza. Luego se dejan en un estante de junco tejido ubicado sobre la chimenea familiar, y van absorbiendo el humo de medida que se secan. La maduración continúa en otro cuarto o en el ático, donde se frotan periódicamente con aceite de oliva y grasa de cordero para mantenerlos húmedos y evitar que se forme moho.
Este queso tiene la DOP Europea.
Usos culinarios: Tablas de quesos.