Felsen-Taler
El Felsen-Taler es originario de la población austriaca de Obervellach, que está rodeada de exuberantes pastos, vacas en pastoreo y las majestuosas montañas del Parque Nacional Hohe Tauern. Este es el escenario donde Malko Käsemanufaktur elabora los mejores quesos con recetas tradicionales y «leche de heno» orgánica. Ingredientes obtenidos directamente de la naturaleza, y un proceso que sigue las antiguas tradiciones y utiliza tecnología a medida.
Malko se encuentra en la provincia austriaca de Carintia y posee el certificado oficial de Bio-Austria. Todos los ingredientes de sus quesos son 100 orgánicos. En Malko, siguen una filosofía simple: tomar los mejores ingredientes y producir el queso de la más alta calidad mediante la combinación de procesos tradicionales centenarios con lo mejor de la tecnología moderna. La quesería envejece sus quesos en cuevas naturales. Según cuentan ellos mismo “durante siglos, los mejores y más nobles quesos han sido envejecidos en cuevas, ya que las bajas temperaturas y la humedad incluso hasta del aire crean el ambiente perfecto para el proceso de envejecimiento, y eso se puede probar”. El Felsen-Taler es un queso elaborado con leche pasteurizada de vacas que se alimentan de heno de agricultura ecológica y se utiliza sal de los Cárpatos. Sabor agradable, lácteo y ligeramente animal. El Felsen-Taler tiene una curación de más de 6 meses en la oscuridad y silencio de cuevas naturales. Este tipo de maduración le otorga al queso una corteza natural enmohecida entre negra, marrón oscuro y gris como la piedra y está salpicada con multicolores manchas oscuras y manchas de moho de color amarillo o blanco, liberando un inconfundible olor a tierra, musgo y setas que nos certificar su largo confinamiento en cuevas naturales. En su interior la pasta de color amarillento es cerrada y compacta con ojos de fermentación ocasionales. Su textura es fina y lisa. Olor lechoso y aroma picante con ligeras notas de tierra. Es un queso ecológico y sin lactosa. La característica más acusada de este queso es su contraste de aromas, entre la rústica corteza y su pasta que nos sorprende con una dulzura encantadora y apacible. En definitiva estamos delante de un magnifico queso con un rico sabor que resulta estupendo para aquellos que sabemos apreciar los buenos quesos. Es importante consumir el queso a temperatura ambiente, si quiere saborear toda su fragancia de matices. Una vez llevado a la temperatura adecuada, la forma de consumo tradicional es solo, con una rebanada de pan. También es adecuado acompañado de mermelada, yo lo hice con una de tomate y resulto una combinación magnifica, también con frutas frescas, pero se adapta con casi todos los momentos del día, desde el desayuno hasta a dados como aperitivo o formar la base de una ensalada. Disfrute del queso con un vino tinto de la zona, a ser posible de uvas Zweigelt, una cepa indígena que consigue un vino de intenso color púrpura con aromas de arándanos. Si no tenemos la oportunidad de encontrar ese vino, un Cabernet Sauvignon o un Pinot Noir, también serían muy adecuados. Este queso lo podéis adquirir en la quesería Can Luc ubicada en el Carrer de Berga, 4 del Barrio de Gràcia de Barcelona.