Etoile de Gâtine
Este queso fermier como indica su nombre procede de Gâtine una zona histórica, en el oeste de Francia. Es una tierra mimada porque es una región agrícola, donde crecen los manzanos y castaños. Es un lugar saludable, ideal para el desarrollo y la alimentación de las cabras que dan la leche de este producto tan distintivo. De la misma familia que el Cendré de Niort. La misma leche, la misma cuajada con formas y edades diferentes que producirán quesos con diferentes gustos.
El Etoile de Gâtine tienen una fina corteza enmohecida y se hacen a partir de leche cruda de cabra, para el mercado de exportación con frecuencia se pasteurizan y carecen de la capa de ceniza, los quesos vienen en forma de estrella. Durante el envejecimiento, desarrollan una corteza profundamente estriada. El Etoile de Gâtine se come comúnmente con unas tres o cuatro semanas de edad, en esa época el interior del queso es muy cremoso y los sabores son salados y herbáceos que termina en una fresca y limpia nata láctica. Sin embargo, si lo desea, los quesos pueden madurar correctamente durante varias semanas más, produciendo una textura suave, más densa, adecuada para comer o untar. Estas versiones tienen un sabor más salado y pronunciado, pero manteniendo una fresca acidez se asocia perfectamente con un vino del Loira, como un Sancerre.
Excelente para untar derretido sobre rebanadas de pan, en ensaladas o para enriquecer sopas. Por supuesto en una tabla de quesos.