Crottin Fermier de Cocumont
El Crottin Fermier de Cocumont es un queso de granja, que como indica parte de su nombre, proviene de la granja de Jean-François Bandet en la población de Cocumont, localidad de Lot y Garona en la recién formada super-región de Nueva Aquitania. La otra parte del nombre “crottin” significa literalmente «excremento de caballo». Se cree popularmente que se llama así por su forma, pero los autores piensan que no hay duda de que se llama «crottin», en referencia a la palabra «crot», que significa «hueco» en el dialecto del Berry de donde es originario el más famoso de ellos “Crottin de Chavignol”: los «crots» eran unos agujeros a orillas del río que las mujeres utilizan para lavar la ropa. De ahí se sacaba la arcilla con la que se hacían pequeñas lámparas de aceite. Lámparas que servían como moldes para el drenaje de la cuajada y a los que también se les llamaban «crots».
Valérie y Jean-François Bandet crían más de 60 cabras de raza Poitevine, rebaños de la cantidad de cabezas adecuada para el pastoreo, lo que permite privilegiar la calidad y el suelo, a la cantidad. Esta es una raza de cabras famosa por la calidad de su leche. Los Bandet recibieron la medalla de bronce, en el concurso organizado por Fromagora en 2011, en la categoría «Queso refinado de 4 a 15 días», por la calidad de sus quesos. Es un pequeño queso de cabra clásico que está hecho de leche cruda de cabra con coagulación ácido láctica con una ligera adición de cuajo, moldeado con cucharón y madurado de 4 a 15 días. Después de los cuales resulta un queso de pasta blanca, suave, homogénea y seca, que está recubierta con una corteza natural, delgada y florida. Es un queso de cabra de fuerza media con un olor ligeramente amoniacal, por lo que el aroma y el sabor no coinciden exactamente – el olor es más astringente de lo que cabría esperar del sabor que es bastante dulce y discreto en boca. Por lo que resulta muy apropiado para aquellos que no les gusta el queso demasiado fuerte. Es ideal para los gastrónomos que desean ofrecerse un pequeño tentempié, cualquiera que sea la hora del día: ¡el Crottin Fermier de Cocumont es también delicioso! con pan tostado y mantequilla, en ensaladas o para gratinados. En su zona de producción se usa como ingrediente en recetas; Mousse de queso de cabra con albahaca, jengibre y avellanas o tarta tatin de escarola con queso de cabra. Marida muy bien con vinos tintos secos, como Côtes de Duras.