Cremós de Girul
El Cremós de Girul es un queso artesano que elabora Albert Pons propietario de Formatges Vall de Meranges, en Mas del Sisco, Girul (Meranges) Girona.
Es una quesería familiar donde elaboran este queso de forma artesanal manteniendo el arte de las viejas técnicas tradicionales con los procedimientos modernos. Según me cuenta Albert, la granja últimamente ha ampliado tanto sus instalaciones como su rebaño que actualmente ya alcanza las 500 ovejas.
Hablando con Albert Pons enseguida notas que es un experto artesano quesero perfeccionista e inquieto con muchas ideas y capaz de contagiarte su entusiasmo de tal forma, que cuando terminas de hablar con él, solo piensas en comer todas y cada una de las ocho variedades de quesos que produce, entre ellos el L’Estringoll.
Este queso lleva el nombre del pueblo donde se fabrica Girul, un bucólico lugar que se halla a 1.600 mts.de altitud, muy cerca de Meranges. Es una de las poblaciones más altas de la Cerdanya. Actualmente es un pequeño pueblecito de pocos habitantes donde solo residen tres familias.
El Cremós de Girul es un queso elaborado con leche cruda de oveja de coagulación mixta, no se prensa, se deja escurrir por su propio peso, es un queso que evoluciona con el tiempo puesto que madura de fuera hacia dentro, pero sin llegar a convertirse en un queso seco. (el de la foto superior es un queso joven).
La corteza es blanca o beige los más maduros presentan manchas de moho azul pálido en boca es suave y delicada. Encierra una pasta aún más suave, que sabe a caramelo de leche con la frescura de las flores de la pradera termina con un ligero toque ácido.
Al no moldearse se presenta en formas variadas e irregulares, pero precisamente esta característica es la que le da una nota de exclusividad propia de los productos artesanos como este.
El Cremós de Girul solo se vende en la propia explotación y en el mercado de Alp, cada sábado por la mañana, en el mercado de Puigcerda los domingos y los martes en el de la Seu d’Urgell, durante todo el año.
Es tan delicioso que se puede lamentar el no haber comprado dos, y también tres.
El Cremós de Girul, es un queso perfecto para fundir al horno, me explica Albert; justo cuando la corteza empieza a separarse de la masa, se saca del horno, se pone sobre una tostada de pan y se espolvorea con pimienta negra molida, acompañado de una copa bien fría de cava, el resultado es sencillamente exquisito.