Château Heitenried

Queso elaborado por Wittwer Reto en la quesería Heitenried en el Cantón de Friburgo.
Un respetable castillo, vastas extensiones, leyendas que se remontan al siglo XI. Así es el mundo del noble “Château Heitenried”, un manjar legendario de la quesería Heitenried. Suaves colinas, exuberantes praderas ricas de verdes hierbas y, como telón de fondo, el imponente paisaje montañoso de las cumbres alpinas Eiger, Mönch y Jungfrau. El castillo de Heitenried se asienta en una elevación junto a la quesería y las bodegas de Lustenberger & Dürst. Estos fértiles suelos bendijeron ya a los antiguos señores del castillo otorgándoles prosperidad y seguridad, y aunque esos tiempos ya hayan pasado, la tierra sigue siendo fructífera. En la actualidad, 60 pequeñas granjas de la zona proveen a la quesería de leche fresca diariamente. Siguiendo una antigua receta, se elabora con ella el legendario queso Château Heitenried con su característica corteza untuosa rojiza, una auténtica delicia llena de aroma, rica en carácter y con una textura tierna y cremosa. El Château Heitenried es un queso artesano que se elabora con leche cruda de vacas, de pasta semidura y corteza natural untuosa marrón y seca. La pasta de color marfil hasta ligeramente amarillento tiene pequeños ojos dispersos del tamaño de un guisante, de textura consistente pero más abierta, menos compacta que el Gruyère, es un queso fácil de cortar. En boca se notan claramente los cristales de caseína que le dan un atractivo toque crujiente, de sabor intenso, entre aromático, especiado y afrutado, con notas a frutos secos en el acabado. El sabor se torna más fuerte con la edad. El queso se comercializa en formato redondo con un diámetro 35 cm y 8 cm de altura y un peso aproximado de 7 kg. Tuve la ocasión de probar este queso en las jornadas de puertas abiertas que ofreció “Tot Formatge” una empresa distribuidora / mayorista de quesos ubicada en Sant Feliu de Llobregat. Por lo que el Château Heitenried, ya es posible encontrarlo en España. Se trata de un magnífico queso para aperitivos, desayunos y tablas de queso, en cocina es delicioso rallado sobre pastas y sopas, también sobre patatas, verduras o cremas. Este delicioso queso fundente es perfecto para una raclette o fondue. Sírvalo acompañado de un vino suizo afrutado, un Borgoña tinto o blanco o un Champán, como aperitivo.