Caprella
El Caprella se elabora en la Hacienda Agrícola San Martino, en San Siro, una pequeña localidad italiana de la provincia de Como, en Lombardía.
La hacienda agrícola San Martino con vistas al hermoso lago de Como, nació en el año 2000 gracias a la pasión y la iniciativa de Michela Maldini y la ayuda de su familia. A partir de 30 cabras de la raza Camosciata de los Alpes (ejemplares de talla media-grande, musculosas, robustas y capaces de proporcionar abundante leche y numerosos cabritos) ha incrementado notablemente el número de animales presentes en el actual rebaño hasta llegar a unos 100 animales.
El amor por los animales permite a la familia Maldini tener una particular atención a la salud y al bienestar de cada cabra y de seguir con cura el aspecto relativo la alimentación basada en forrajes, cereales naturales y sales minerales, según los dictados de una alimentación equilibrada.
El Caprella es un queso de pasta blanda tierno, elaborado con leche cruda de cabra, es de color blanco cuando hay Penicillium candidum (moho noble que florece sobre su corteza como una acción protectora sobre el queso) o corteza lavada. El Caprella madura entre 10 y 60 días volteando las formas cada 12 horas sin limpiarlas.
La pasta es de color blanco lechoso, suave y flexible, con un sabor ligeramente amargo, pero agradable. En boca la fina corteza comestible se mezcla con el sabor de la pasta, lo que convierte al Caprella único e inimitable.
El Caprella se produce todo el año y se comercializa en forma cuadrada de 10-20 cm. de lado, con las cara planas de 4 cm. de altura, y un peso de 400 g.
Solo, con pan de nueces o con miel de varias flores, con frutos secos y con salsas o mostazas. Funde bien y resulta excelente para elaborar risotto. Combina bien con vino tinto (Nero d’Avola, Cabernet).