Buenalba al romero
El Buenalba al romero lo fabrica la quesería Artequeso – Buenalba. Sus quesos se elaboran en Finca «La Prudenciana», una explotación agrícola y ganadera situada en Tembleque, en pleno corazón de La Mancha toledana, a 100 Km. de Madrid por la autovía de Andalucía, donde se puede visitar la quesería para conocer su proceso de elaboración. Tembleque es un típico pueblo de La Mancha que está declarado Bien de Interés Cultural por su singular Plaza Mayor de origen en el siglo XVII, esta gran plaza cuadrangular ya te llama la atención desde el momento que te acercas a la misma, pues el acceso a la misma lo debes realizar cruzando bajo un curioso pórtico con columnas de granito.
Según cuentan ellos mismos “Somos ya la cuarta generación de la familia Alvarez Valera empeñada en desarrollar un negocio familiar que tuvo sus orígenes en la agricultura, se complementó posteriormente con ganadería ovina manchega y que a principios de los años 80 inició la transformación de la leche de estas ovejas en queso manchego artesano con denominación de origen. Desde entonces lo comercializamos con el nombre de Artequeso. La experiencia lograda en la elaboración de queso, junto al reconocimiento que nuestros clientes han hecho de Artequeso, nos ha animado a ampliar nuestra gama y presentar una variedad de quesos curados de leche cruda de oveja y de cabra bajo la marca Buenalba, cuyo denominador común es la calidad de una materia prima seleccionada y el respeto por la tradición artesana de una curación esmerada”. El Buenalba es un queso elaborado con leche cruda de oveja, de coagulación fundamentalmente enzimática, de pasta prensada, firme de color blanco-marfil con partículas verdosas de romero y con ojos desigualmente repartidos. Corteza untada con manteca de cerdo y romero. Olor suave y láctico, con notas de romero y a campo. Sabor ligeramente acido, fuerte y sabroso que se intensifica con la curación, gusto residual a romero. Posgusto persistente y agradable a queso de oveja de leche cruda. Es perfecto para comer solo o acompañado con pan crujiente, o en una tabla de quesos. En cocina, sobre patatas cocidas, o en platos de pasta. Se adapta maravillosamente bien con vinos tintos de la tierra.