Bello

El Bello es un queso artesanal de leche cruda, originario de un solo rebaño de vacas de la Fazenda Cruzeiro, ubicada en el municipio de Cruzeiro da Fortaleza (Cerrado de Minas Gerais), y madurado en Belo Horizonte por el afinador de quesos João Bello que lo lava con salmuera y lo madura de 4 a 5 semanas a baja temperatura y alta humedad.
El Bello es un queso de corteza lavada inspirado en los quesos franceses de corteza lavada parecido a su primo portugués Serra da Estrela pero más impactante.
Durante su maduración se somete a sucesivos lavados y cepillados con salmuera (agua con sal), que durante el proceso, a baja temperatura y alta humedad, forman compuestos de azufre, lo que le da a este queso su fuerte y apestoso aroma que contrasta con la delicadeza de su sabor.
La corteza ligeramente húmeda y bastante pegajosa se convierte progresivamente en suave, flexible y brillante, tomando un bonito color anaranjado. En su interior la pasta es blanda, lisa, suave, homogénea, cremosa de color amarillo a marfil.
En este proceso, el queso Bello adquiere una textura mantecosa y una apariencia cremosa y pegajosa.
Según las palabras de su creador: «digo que trabajo con quesos salvajes. Ellos maduran y yo viabilizo su entendimiento para presentarles a quién los va a saborear.»
Para degustar toda la riqueza de sabores se recomienda el consumo a temperatura ambiente. Una vez llevado a la temperatura adecuada, disfruté de este queso untando sobre una rebanada de pan crujiente o fundido sobre pasta, patatas cocidas o verduras, con frutas y nueces, en sándwiches, para enriquecer sopas y para espesar salsas, y por supuesto en una tabla de quesos.
Lo acompañaremos con una cerveza Pilsen si se quiere atenuar su grado de alcohol y su potencia.